EL CONTADOR DE HISTORIA : Otra forma de mantener viva nuestra identidad
La ilustración muestran a Nicolás Danies Kenedy y Gerardo Danies
El territorio de La Guajira ha sido blanco de migraciones
casi desde el mismo momento de su descubrimiento cuando Alonso de Ojeda, en
lo que hoy es Colombia, en el año 1499 tocó costa en el Cabo de la Vela,
península de la Guajira., éxodo que han marcado su historia y construido su carácter,
el propósito de este trabajo es identificar los elementos positivos y negativos
que a través de los años el territorio recibió a partir de estos impactos
sociales, el objeto al final del trabajo que consta de docenas
de capítulos, es construir un diagnostico que nos revele:
1- Que paso en la Guajira durante estas épocas
de éxodos migratoria al interior del territorio y el Porque de nuestra situación actual.
2- El porque de nuestra actual situación
de postración, pobreza y desolación presente sobre todo en su capital Riohacha,
la cual sea dicho de paso, ha sido la mas impactada sobre todo por las
influencias negativas de estos fenómenos Migratorios.
La
actividad económica que penetro a Colombia por la guajira, pronto se rego por
gran parte del territorio Nacional, la falta de capacidad y visión de los
gobernantes de una Nación como Colombia todavía muy joven como república, les
impidió ver el verdadero valor y potencial que encerraba la actividad mercantil
desarrollada por los migrantes Europeos en este territorio desde los albores del siglo XVIII, la intervención del
Estado Republicano de Colombia con sus pesadas cargas impositivas, represión y
prohibiciones dio al traste con lo que podría haber sido un icono de
desarrollo económico continental, La Guajira con todas sus capacidades y
potenciales intactos, ensanchada bajo el
empuje y la dinámica impuesta por los migrante Europeos y curazaleños recién
llegados a nuestras Costas, engranaban perfectamente. Ellos lograron en poco
tiempo hacer de Riohacha un puerto destacado a nivel internacional, que
comercializaba e intercambiaba diversas mercancías con mucha facilidad, con las
más grandes economía del Mundo en esa época. Las
grandes virtudes del territorio fueron manejadas de manera magistral por estos
talentosos negociantes.
Los
comerciantes de Curazao fue uno de los grupos sociales más dinámicos de las
fronteras de la Guajira durante los siglos XVIII y XIX. el comerciante de
Curazao contribuyo de una manera decisiva para el proceso de articulación
económica y política entre las sociedades de las Antillas holandesas y la
Península de la Guajira en las épocas colonial y republicana: perfeccionando
las técnicas y diversificando las actividades comerciales, o adquiriendo cierta
independencia con respecto al tráfico atlántico. En este sentido, los autores
que trabajan este tema, y que no son pocos, coinciden en que los comerciantes
de Curazao no solo representan la figura del empresario libre e independiente,
sino que también expresan esa realidad económica y cultural heterogénea y
dinámica de los espacios de frontera caribeños como la Península de la Guajira.
Los
registros notariales de Riohacha revelan las redes familiares extensas utilizadas
por los comerciantes de Riohacha para circular en las redes mercantiles. Un
caso muy significativo es el del comerciante Nicolás Danies Palm, cuyo
testamento sirve como evidencia textual para reconstruir lo que denominamos
estrategias de movilidad en función de los recursos familiares. El testamento
de este comerciante holandés fue revelado en el año de 1879 por el contador
Juan Gómez Daza. Este documento, conservado en el Archivo de la Notaria Primera
de Riohacha (ANPR), es un testimonio de la red de relaciones del comerciante
Nicolás Danies a lo largo de su vida. Describe fehacientemente una repartición
de bienes entre los miembros de una familia del siglo XIX. La partición escrita
por Gómez nos aporta un conjunto de valiosas informaciones, que nos ha
permitido arribar a importantes conclusiones en relación con las redes
familiares extensas que utilizó el mismo Danies para circular por diferentes
lugares. El segundo análisis trata de las estrategias de movilidad mercantil de
los comerciantes Moisés Rois Méndez, Rafael Barliza, Jacob A. Correa y Jacob
Pinedo. El protagonismo de estos comerciantes en un acta notarial es un
indicador de sus relaciones sociales de negocios en las redes locales y
regionales hacia el año de 1841. La principal aportación en este sentido es las
importancias de las redes familiares extensas en el estudio de las prácticas
cotidianas de los comerciantes en las zonas de frontera. En este orden de
ideas, sostenemos que las estrategias de movilidad de la comunidad mercantil de
Riohacha se sustentaban en los reconocibles lazos de parentesco, amistad y
negocios.
La estructura organizacional casi perfecta con elementos estratégicos que desarrollaron
estos grandes comerciantes y Visionarios, denota una habilidad innata y casi perfecta, que nos hace entender
que no se trataba de negociantes comunes, eran verdaderos talentos con grandes
habilidades las cuales presuponemos hacen parte indudablemente de unas líneas
genéticas transmitidas y conservadas a través de varias generaciones en sus
vínculos familiares, vínculos familiares muy fuerte y estrechos que denotan el gran valor que para ellos significaba la célula familiar, consistente y base piramidal de su solides empresarial.
Un
elemento que debemos distinguir es la gran habilidad y facilidad, que mostraron
los migrante europeos para interpretar las grandes potencialidades del
territorio guajiro, que aunado a una excelente posición geoestratégica le
permitió a la guajira hacer parte importante del comercio mundial con altísimos
niveles de competencia. Pensamos que esta condición histórica del espacio
fronterizo guajiro fue uno de los factores que contribuyó a la conformación de
una comunidad mercantil holandesa en la Guajira desde 1830, la cual se radicó
principalmente en la ciudad portuaria de Riohacha desde donde estableció una
compleja red de relaciones que los mismos comerciantes estructuraron con otros
individuos y grupos de la región y el exterior.
Lamentablemente
una vez constituida la Republica, Bogotá no miro con buenos ojos este gran Imperio
en formación, sino que por el contrario, de manera penosamente lamentable trato
por todos los medios de obstaculizar, poniéndose en contra del maravilloso
proceso desarrollista que se habría paso en La Guajira, obtuso criterio, que
manejaba un concepto de centralización de todos los procesos Económicos y
políticos en Bogotá, condición que aun prevalece, con una visión terca, parca y egoísta, con un agravante, la desfiguración del
verdadero carácter emprendedor de la gente que poblaba en ese entonces el
territorio, no eran visto como lo que realmente eran grandes
líderes-empresarios, sino que fueron estigmatizados como simples contrabandistas
de frontera. Este concepto negativo e injusto lograría que la guajira se convirtiera en un
territorio vetado y sin anexar tanto cultural, social y políticamente al territorio
nacional por años. Esta torpe visión Bogotana fue una de las más fuertes razones para
que este proceso de intercambio económicos a gran escala no se consolidara en
La Guajira, por el contrario, promovió el gran contrabando que
domino el territorio por décadas como respuesta a la represión del estado, en
este caso podemos ver la ilegalidad en las zonas de frontera, lejos del
gobierno central y en ausencia de instituciones fuertes, como una estrategia de
supervivencia por parte de su población nativa y de los comerciantes. Francisco
Comín considera el contrabando como una actitud de resistencia, “una reacción.
¿Qué
paso con los descendientes de los primeros Migrantes llegados a Riohacha desde
Curazao?
Los
Hijos de Nicolás Danies Palm.
Nicolás
Danies Palm padre se había casado con Margarita Keneri durante la crisis
comercial de Curazao de 1820 y emigraron a Riohacha en 1831 (González
2011:16). Habían tenido muchos hijos,
pero las noticias que nos quedan se refieren solo a diez: tres varones y siete
mujeres. Nicolás Danies había muerto más bien anciano y al parecer había
establecido como condición para la herencia que sus hijos siguieran unidos en
los negocios de la casa y bajo la gestión del tercero de los varones, Nicolás
Danies junior (ANPR [1879:183rv]). Este heredero había nacido en Riohacha y
había sido aceptado como autoridad indiscutida por su padre y hermanos por
haber sido el último de los hijos varones en la administración de la casa
comercial de Riohacha. Pero seguir unidos en los negocios de la compañía
significaba una sola estrategia de Nicolás Danies padre: las conexiones entre
herederos entorno a los negocios de la firma. (Carrillo Ferreira, Hugo Nacuzzi, Lidia)
Aquí
se muestra con claridad los fuertes nexos que conservaban las familias europeas
que migraron por Riohacha a Colombia, nexos que aún se pueden evidenciar en los
comportamientos de las familias que quedaron en Riohacha y aun, las que
migraron a Santa Marta, Valledupar, Cartagena, Sobre todo los descendientes de
Judíos Sefarditas, que heredan esta tradición del pueblo judío.
Lamentablemente
la parte gruesa de esta diáspora, también migro de Riohacha, y en este nuevo
éxodo se fueron las principales cabezas que componían los cuadros humanos con
mayores capacidades y potenciales, estos se diseminaron por todo el pais, principalmente en la Costa Atlántica, llevando
ideas y construyendo desarrollo a partir de sus inagotables talentos, sus ideas
y empresas fueron motor para el desarrollo de importantes sectores del pais,
pero lo más relevante de este punto es que fueron primeros colonizadores en
Riohacha, donde desarrollaron la parte estructural de su legado empresarial y
Mercantil.
Los ejemplos son múltiples con respecto a la
gran y decisiva influencia de las genealogías europeas llegadas a Riohacha a
partir del Siglo XVIII en el desarrollo del pais, pero tomemos el caso de
Catalina Danies Kennedy, una de las hijas de Nicolás, que se casó con el
abogado cartagenero Dionisio Vélez. Fueron sus hijos Carlos, Fernando y
Margarita Vélez Danies, todos nacidos en Riohacha. Catalina murió joven, por lo
que los niños fueron criados por el padre y contaron con la protección de los
abuelos maternos. Carlos y Fernando
fueron enviados a estudiar a Inglaterra, siendo todavía adolescentes. En esos
años su padre contrajo segundas nupcias con Dolores de Pasos (1878) y ocurrió
la muerte de su abuelo Nicolás Daníes (1881). Es probable que la muerte de su
abuelo hubiera ocurrido cuando ellos estudiaban en Europa. Lo cierto es que en
1883 los tres hermanos estaban radicados en Cartagena, ya que en ese año
formaron la sociedad comercial “Vélez Danies y Cía.”27. Por problemas
familiares su hermana Margarita se radicó en Curazao y fue excluida de la
sociedad.
Los
riohacheros Carlos y Fernando Vélez Daníes se convirtieron en los empresarios
más prósperos de Cartagena a finales del siglo XIX y primeras décadas del XX.
Sus inversiones fueron cuantiosas y diversificadas: fueron grandes
terratenientes y ganaderos en el departamento de Bolívar. Durante varios años
fueron los principales proveedores de ganado vacuno para Cuba y Panamá.
Luego
se convirtieron en empresarios azucareros y fundaron el ingenio Central
Colombia (1908-1909), uno de los más grandes del país. Para montar este ingenio
los hermanos Vélez Daníes contaron con la asesoría de ingenieros cubanos,
quienes les recomendaron comprar una moderna maquinaria hecha en Glasgow
También fueron fundadores o accionistas de empresas como la Cartagena Oil
Refining (1907), Fábrica de materiales de construcción El progreso, Cervecería
de Cartagena, The Colombia Products, así como los Bancos Popular y de Bolívar.
A nivel gremial participaron en la creación de la Cámara de Comercio de
Cartagena en 191529. Estos dos prósperos empresarios riohacheros encontraron su
nicho de mercado en Cartagena, desde donde extendieron sus negocios a Cuba,
Panamá, Estados Unidos y otros países.
Los
brillantes empresarios seguían regando su influencia y visión para construir
desarrollo por el pais forjando la célula básica del despertar industrial de
importantes sectores de la Costa Atlántica, los cuales después serian la base
del desarrollo de la region. (Joaquín Viloria de La Hoz)
La
dinámica economía de frontera que se desarrollaba en Riohacha seguía siendo
atractiva a principios del siglo XX, para jóvenes emprendedores extranjeros. Uno de estos jóvenes fue
Samuel Pinedo, hijo de Gabriel Pinedo y Juliet Ester del Valle, judíos
sefarditas nacidos en Curazao. Esta familia de comerciantes y políticos de
origen sefardí ha tenido relación con el Caribe colombiano desde la segunda
mitad del siglo XVIII. A mediados del siglo XIX Gabriel se había convertido en
el segundo hombre más adinerado de Riohacha y Curazao, después de Nicolás
Danies. Samuel heredó la tradición comercial de sus ancestros, lo que lo llevó
a crear negocios de toda índole en Curazao, Riohacha, Santa Marta y
Barranquilla. Ante las dificultades de conseguir agua potable en Riohacha, en
1876 impulsó y financió la canalización del río Ranchería y en 1878 se ganó la
concesión para explotar las salinas de la Guajira. Estas concesiones por lo
general se la ganaban los afectos al gobernante de turno, razón por la cual se
le considera como una función empresarial improductiva.
Pero
donde fueron los demás hijos de Nicolas Danies Los otros dos hermanos varones,
Gerardo y Bernardo, residían en el exterior: Gerardo, el mayor de los hijos
apenas se recuperaba de una grave enfermedad mental en un hospital de Francia;
Bernardo por su parte iniciaba su carrera comercial como viajero de negocios.
Este año de 1879 es un momento difícil para esa extensa familia de
comerciantes. La cabeza más visible se había ido. Nicolás Danies padre había
muerto a la edad de 79 años. Había hecho un testamento en el que dejaba
explícitamente a sus hijos la amplia red de relaciones comerciales de su casa
comercial de Riohacha. La Casa Danies era una sociedad estrictamente familiar
cuyas redes de parentela y negocios se extendían por Riohacha, Curazao, Santa
Marta, Cartagena, Bogotá y Nueva York. Desde 1840, el grupo familiar compuesto
por Nicolás Danies Palm y sus hijos, realizaban continuos viajes y alianzas de
comercio con otras familias de otros sitios, con el fin de ampliar sus
negocios, sobre todo en lo que refiere a “documentos de crédito publico”,
“bonos americanos” y compras de propiedades urbanas y rurales. En efecto, tres
negocios que habían desplazado al palo de Brasil luego del desarrollo de los
colorantes sintéticos.
Después
de la muerte de Nicolas Danies padre, La cabeza más visible se había ido.
Nicolás murió a la edad de 79 años, pero antes de morir había hecho un
testamento en el que dejaba explícitamente a sus hijos la amplia red de
relaciones comerciales de su casa comercial de Riohacha. La Casa Danies era una
sociedad estrictamente familiar cuyas redes de parentela y negocios se
extendían por Riohacha, Curazao, Santa Marta, Cartagena, Bogotá y Nueva York.
Desde 1840, en el proceso de sucesión, se encuentran algunos casos de
testimonios que muestran las complejas redes comerciales en que había circulado
Nicolás Danies padre durante su vida mercantil cotidiana en Riohacha, este
mismo evento de sucesión fue usado para calcular la ingente fortuna que logro
amasar este gigante del negocio el comercio y el emprendimiento a nivel internacional.
Nicolas
Danies logro extender sus redes hasta los estados Unidos, Danies se asoció con
el estadounidense Royal Phelps, un comerciante y empresario de Nueva York, al
que le otorgo poderes de representación legal para la administración de “los
bonos americanos” de propiedad de su esposa Margarita. El trato entre uno y
otro estuvo basado en la confianza, la lealtad y la reputación que derivaron de
esta red mercantil internacional.
Phelps
no era un empresario cualquiera en los estados Unidos, Phelps aparecía en
ocasiones acompañando por el Secretario de Estado del Gobierno de los Estados
Unidos Lewis Cass y su asistente John Appleton (Phelps 18/12/1859); fue muy
conocido y aceptado como prestigioso hombre de negocios, en la industria y las
finanzas del Estado de Nueva York. Danies había conocido a Phelps a través de
los navegantes mercantes que llegaban de la costa oeste de los Estados Unidos.
Siendo Phelps empresario alcanzó a recomendar a Nicolás Danies como Cónsul de
Estados Unidos en Riohacha (Danies [1-12-1859]20).
Un
año después de la muerte de Nicolás Danies padre, la casa comercial y el
consulado de Estados Unidos en Riohacha empieza a ser operado por Nicolás
Danies hijo quien había heredado con este cargo la amplia red de relaciones
comerciales con Nueva York, Curazao y la Guajira. El 23 de julio de 1880
Nicolás Danies hijo hace su primer informe al Departamento de Estado en
Washington sobre la situación política de los mercados, los productos y las
oportunidades de negocios en la Guajira. Desde Riohacha, Nicolás (hijo)
reportaba [23-06-1880] que la Península era una “región lo suficientemente rica
en elementos para ocupar un 154lugar más alto en el mundo comercial”, pero “las
continuas revoluciones en Riohacha y las miserables formas de comunicación del
país mantenían al comercio muy atrasado”. Estos inconvenientes plantearon
“dificultades para la exportación de la gran variedad de madera, apta para los
propósitos de la construcción y la tintura, en el que los grandes y casi virgen
bosques de Riohacha y la Guajira abundan”. Estas condiciones también “impedían
la exploración y explotación de algo de oro, cobre, mineral de hierro y las
minas de carbón”. Esta última situada a unas 30 millas de esta ciudad, la cual
se extendía hasta el Cabo de la Vela (Danies [23-06-1880:1r] traducción
propia). Tomado de (Carrillo Ferreira, Hugo Nacuzzi, Lidia)
La
descendencia de Nicolás y otros que le acompañaron como Moisés Roy Méndez,
Gabriel Pinedo y muchos otros regaron la sangre y su legado por todo el pais y
con ellos se fueron grandes intelectuales, comerciantes, empresarios e
industriales, que sembraron sus positivas influencias, sorprendentemente en otros
lugares de la geografía nacional, diferentes a la guajira, hoy paradójicamente
La Guajira sigue siendo un lugar inhóspito en extensas zonas de su geografía,
con grandes falencia en temas de infraestructuras primarias, sin estructuras
productivas propias, con una capital Riohacha que presenta grandes desafíos por
su estancamiento, pobreza y niveles de atraso en temas de infraestructuras y
desarrollo humano, esa misma Riohacha llamada alguna vez la ciudad portuaria,
es hoy un remedo de ciudad postrada con grandes brechas que nos separan de las
otras ciudades principales de la Costa por años luz, que paso, porque nos
quedamos, porque la corrupción se la ha tomado como un trofeo para
pulverizarla, porque la gente no reacciona, que tipo de ciudad hemos
construidos y cuál es el destino de una sociedad cautiva por la inmoralidad, hemos descendido tanto que se
perdió el norte hace mucho tiempo y lo impúdico se convirtió en el elemento esencial para triunfar, los principios
se perdieron y eso, se llevó todo.
La
forma como se montaron las redes
comerciales que lograron construir con la Guajira, Curazao y Nueva York estos visionarios y desarrollistas, hoy deben
ser ejemplo para nuestras generaciones actuales y próximas, que si es posible
avanzar y construir riquezas y prosperidad, empresas e industrias, con solo
comprender el uso y la explotación eficiente, oportuna. optima y acertada de los
grandes potenciales de una region..... una region como la guajira, que hoy aun
presenta mejores condiciones para que en ella florezca el desarrollo, el
bienestar, las oportunidades, solo hay que conectarnos con el universo
circundante, los grandes mercados internacionales están ahí, los mercados se
mueven bajo los mismos principios y fundamentos. Hoy La Guajira sigue siendo el
mismo lugar con excelente posición geoestratégica, riquezas naturales, talento
humano y una gran proyección para establecer ofrecer sus productos al Mundo con
altas tazas de valor agregado
Por: Federico Acuña Mendoza
Ingeniero Industrial y Periodista Cel 305 2358742
federico.guajiro@gmail.com
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